«Nada, nin, que esta vez tampoco me ha tocado el Gordo. Qué mala suerte tengo con la lotería.» Todos los años tu abuela te dice lo mismo después del sorteo. Tú intentas consolarla explicándole que su número era 1 entre 100 000, que la probabilidad es sólo del 0.001%, pero los fríos números no le dicen nada. Así que este año vas a explicárselo con ejemplos que pueda entender mejor. Por ejemplo, cuánto son una gota, un latido, un pelo, un parpadeo o un paso entre cien mil. Y como siempre, le recordarás que lo importante es tener salud.
Si quieres consolar a tu abuela sin hablarle de probabilidades, porcentajes y números, tendrás que buscar ejemplos que todo el mundo entienda. De paso, también tendrás una manera curiosa de explicárselo a tus amigos, tu jefe, tu vecino o tu peluquero.
Aquí tienes algunas cosas que son (aproximadamente) 1 entre 100 000, igual que un número entre todos los que participan en la lotería de Navidad:
Una gota de agua en una garrafa de cinco litros, porque cien mil gotas hacen cinco litros.
También puedes verlo como una gota de tu sangre, porque tenemos unos 5 litros de sangre en el cuerpo.
Un latido de tu corazón entre todos los latidos de un día, porque el corazón late unas cien mil veces al día.
Un pelo entre todos los de tu cuero cabelludo, porque la media es de unos cien mil pelos.
Un parpadeo de entre todos los que harás a lo largo de diez días, porque se parpadea alrededor de 10 veces por minuto y descontando 8 horas al día para dormir hace falta ese tiempo para llegar a cien mil parpadeos.
Uno de los pasos que darías si hicieras andando una maratón, porque éstas miden aproximadamente cien mil pasos.
Uno de los bocados que darás (comiendo) en 2 años, porque se dan unos 45 bocados por comida y con tres comidas al día necesitarías dos años para dar cien mil bocados.
Una palabra entre todas las de un libro de unas 300 páginas, por ejemplo El Hobbit tiene cerca de cien mil palabras.
Un espectador entre todos los que caben en el Camp Nou, pues éste tiene casi cien mil localidades.
Si, como a mi abuela, no te ha tocado nada, quizá te consuele hacerte a la idea de lo difícil que era. Como a ella, tampoco seré yo quien te diga si debes jugar o no 😉
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Nota 1: Esta entrada ha llegado al Olimpo en Divoblogger. ¡Gracias!
Nota 2: Esta entrada participa en la edición 4.123105625 del Carnaval de Matemáticas, cuyo blog anfitrión es Que no te aburran las mates.
Para saber más:
A tu abuela quizá no le diga mucho, pero si te van las matemáticas puedes consultar esta página con los cien mil primeros dígitos del número Pi y elegir uno entre todos ellos.
También te recomiendo consultar esta creación de Google con la que puedes moverte por las cien mil estrellas más cercanas, tranquilamente desde tu navegador (en realidad son unas pocas más que cien mil).
Por último, no quiero dejar pasar la ocasión para concienciar sobre las enfermedades raras. Para entender mejor lo pequeño que es 1 entre 100 000, puedes pensar que el umbral para que una enfermedad sea considerada rara es que afecte a 50 de cada 100 000 personas.
Imágenes:
Garrafa de agua por Xavigivax, en Wikimedia Commons. Gota de sangre por Mattia Belletti, en Flickr. Gráfica de latidos del corazón por lookcatalog, en Flickr. Pelo por kozumel, en Flickr. Ojo por Lima Pix, en Flickr. Gente caminando por johnpotter, en Pixabay. Mordisco por Orin Zebest, en Flickr. El Hobbit por Jemimus, en Flickr. Camp Nou por JonathanVitela, en Flickr.
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